QEPD: La ventana indiscreta
Tras más de 5 años en el aire, uno de los programas más cuestionados del periodismo peruano, llega a su fin.
No quiero hacer de esto un réquiem, ni tampoco voy a referirme al estilo periodístico que ha caracterizado al programa dirigido y conducido por Cecilia Valenzuela, sino más bien señalar que los bibliotecólogos que trabajaron en agenciaperu.com muy probablemente han aprendido mucho tratándose de una empresa periodística que maneja grandes cantidades de información, si claro, seguramente, cambios han habido en estos 5 años, 3 de los cuales pude contemplar de cerca, pocos pueden observar el nacimiento y crecimiento de un acervo documental periodístico de archivo. Una colega mía, de "Canal N", ya había gestionado e implementado un sistema de servicios diferenciados que encaje en la producción periodística garantizando la provisión de imágenes televisivas, algunos traspiés en el camino se fueron asimilando para perfeccionar el sistema, pero el canal ya dispone de un centro de información interno que pudo servir de modelo, lo mismo se pensó del sistema creado para el noticiero de 90 Segundos, un sistema que ininterrumpidamente facilita la provisión de imágenes al usuario final que es el reportero.
Pero no es simple, no se pueden tomar a la ligera las mismas atribuciones concebidas para la realidad de una organización, entonces, se puede hablar de pautas que van a señalar el tipo de sistema que más le convenga a un noticiero, a un programa dominical, un programa de opinión, un programa de variedades, un programa de investigación, un magazine, etc. En toda esa tipología, a estas alturas, no es muy difícil ubicar a un programa como La Ventana Indiscreta entre los programas periodísticos de investigación con alto grado de opinión política, a veces llevado por la excentricidad del manejo de imágenes y, por supuesto, la extensa documentación que se maneja para llevar a cabo su producción.
En mi experiencia personal, no he tenido que vérmelas con el acervo textual acumulado de periódicos, files, papelería, expedientes, revistas, recortes, fotografías, etc. sino con el material audiovisual, soportes fílmicos, magnéticos y ópticos, cuyo tratamiento y análisis involucran algunos aspéctos semánticos y elementales para la descripción de imágenes que son incompatibles con los tradicionalmente aplicados a la documentación bibliográfica que aprendimos en la escuelita.
Esta experiencia significó una gran ocasión para notar las grandes diferencias que sobresalen entre programas periodísticos de diferente formato, naturaleza e índole. En bibliotecología, estos temas no han sido explorados en toda su dimensión por estar relegados a la investigación en comunicación social desde su propia óptica. Por lo tanto, en la especialidad tenemos una gran oportunidad para discutir más a fondo los temas sobre documentación audiovisual en televisión y las implicancias que pueda potencialmente tener en los contenidos noticiosos de la programación televisiva, más allá de los estilos que caractericen, la comunidad bibliotecológica local no está muy enterada del asunto. En eso si estamos bastante rezagados, mientras en otros países estos estudios, actividades y fenómenos son ampliamente discutidos y conocidos en la sociedad de la información, aquí, en Perú, todos ven la televisión, los programas terminados, todos ven los trabajos editados, los reportajes presentados, etc. pero nadie ve el proceso de elaboración de los trabajos de edición, nadie nota el tremendo esfuerzo que hay detrás, el valor de la especilidad y su contribución científica para el manejo de imágenes de archivo, ha sido decisivo para que un programa como la Ventana Indiscreta se haya mantenido tanto tiempo al aire.
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Gabriela
Daniel